En los últimos 10 años se ha llegado a un cierto consenso alrededor de la idea de que la teoría de la evolución cultural es darwiniana en la medida en que comparte con la teoría evolutiva en biología, cierta adhesión al pensamiento poblacional. Pero ¿qué es exactamente el pensamiento poblacional y cuál es su papel en la teoría de la evolución cultural? El filósofo británico Tim Lewens, quien en los últimos años ha dedicado mucha atención a esa cuestión, considera que el pensamiento poblacional (en la formulación originaria de Ernst Mayr) contiene tanto una tesis metafísica —concerniente a la relación entre propiedades de individuos y propiedades de poblaciones— como una tesis metodológica —esto es, que las dinámicas de las poblaciones deberían ser explicadas causalmente con referencia a agregados de interacciones individuales. En contra de la tesis metodológica, defenderé que si hay algo nuevo en la teoría de la evolución cultural respecto a otras teorías tradicionales del cambio cultural es, justamente, que ella puede concentrarse en las dinámicas de las poblaciones sin hacer referencia directa a las interacciones individuales. Mostraré cómo, al fin y al cabo, esta perspectiva es perfectamente compatible con el pensamiento poblacional y esbozaré algunas consideraciones sobre el tipo de explicaciones que ella permite.